El servicio de mensajería instantánea que forma parte de la vida cotidiana de 2.000 millones de personas había anunciado que, a partir del 8 de febrero, cancelaría el acceso de aquellos usuarios que no aceptaran sus nuevas condiciones de uso. Dada la polémica generada por esa decisión, WhatsApp debió dar marcha atrás con la medida.
WhatsApp inició el año con una importante novedad: les pidió a sus usuarios que aceptaran sus nuevas políticas de uso como condición obligatoria para seguir utilizando el servicio. Al dar su consentimiento, quienes utilizan la aplicación le dan permiso a WhatsApp para compartir información con la empresa que es su dueña desde 2014, Facebook.
En principio, la fecha límite para aceptar esas nuevas condiciones era el 8 de febrero. Las quejas de un gran número de usuarios, que consideraron la medida como una amenaza a su privacidad, no tardaron en llegar y se multiplicaron a través de diversas redes sociales. Asimismo, muchos de ellos decidieron abandonar WhatsApp y optar por otros servicios de mensajería instantánea, como Telegram y Signal.
Frente a esta situación, y para detener la migración de sus usuarios a las aplicaciones que son su principal competencia, la compañía debió reconsiderar la medida. Finalmente, por un lado, se decidió extender el plazo para aceptar las nuevas condiciones: ahora, la fecha límite es el 15 de mayo. Por otro lado, y debido a la fuerte presión de los usuarios, quienes no acepten la actualización de las políticas de uso no perderán sus cuentas, sino que recibirán recordatorios periódicos de que no lo hicieron y, además, verán limitadas -de manera gradual- algunas funciones de la aplicación.
Al respecto de esta medida, la compañía había aclarado desde un inicio que no se compartirá el contenido de los mensajes intercambiados a través de la aplicación. Ahora, además, se expresó de manera oficial que se implementarán acciones para acabar con la desinformación y las dudas con respecto a la seguridad del servicio.
“Muchas personas expresaron que existe una gran confusión con respecto a nuestra reciente actualización. Debido a la divulgación de tanta información falsa que genera preocupación, queremos ayudar a las personas a conocer los hechos y comprender nuestros principios”, indicó la plataforma de mensajería en el nuevo comunicado que presentó para informar la modificación en las condiciones de la medida.
Seguidamente, el texto subraya que el espíritu de la aplicación es que los mensajes intercambiados permanezcan en el ámbito de lo privado: “Esto quiere decir que siempre protegeremos tus conversaciones personales con cifrado de extremo a extremo, de modo que ni WhatsApp ni Facebook puedan ver esos mensajes privados”, aseguraron, y agregaron que la compañía no mantiene un registro de las personas a las que cada usuario llama o envía un mensaje, así como tampoco pueden ver las ubicaciones que se comparten, ni comparten los contactos de sus usuarios con Facebook.
Más allá de la modificación que el servicio de mensajería decidió llevar a cabo, el objetivo de las nuevas políticas sigue siendo el de permitir que los anunciantes puedan contactar a potenciales clientes a través de WhatsApp, o incluso realizar la venta de sus productos directamente en la aplicación. “Como anunciamos en octubre, WhatsApp quiere facilitar que las personas realicen compras y obtengan ayuda de una empresa directamente en WhatsApp”, expresaron desde la compañía, y agregaron: “Todos los días, millones de personas en todo el mundo se comunican de forma segura con todo tipo de empresas en WhatsApp. En el caso que el usuario elija enviar mensajes a las empresas, queremos que lo haga de la forma más fácil posible”.
En relación a este tema, la compañía se refirió al caso de las grandes empresas que necesitan utilizar servicios de alojamiento de información para poder optimizar la comunicación con sus clientes, y explicó que la actualización de las condiciones de WhatsApp apunta a brindarles a esas empresas “la opción de utilizar servicios de alojamiento seguro en Facebook para administrar los chats de WhatsApp con sus clientes, responder preguntas y enviar información útil como recibos de compra”.
De esa manera, las empresas podrán administrar la información que reciben de sus usuarios a través de las comunicaciones realizadas por teléfono, correo electrónico o WhatsApp, y usarla -por ejemplo- para realizar publicidad en Facebook. “Para asegurarnos de que los usuarios estén informados, etiquetamos claramente las conversaciones con las empresas que eligen utilizar los servicios de alojamiento de Facebook”, puntualiza el portavoz de la compañía quien, además, deja en claro que por el momento no se ofrecerá ningún tipo de publicidad en WhatsApp.
Por su parte, desde Facebook afirmaron que la actualización “no cambia las prácticas de intercambio de datos de WhatsApp con Facebook y no afecta la forma en que las personas se comunican en privado con amigos o familiares en cualquier parte del mundo. WhatsApp sigue totalmente comprometido con la protección de la privacidad de las personas”.
Una particularidad de la medida es que las nuevas condiciones son diferentes para los países pertenecientes a la Unión Europea y Reino Unido, donde solo se usarán con el fin de crear las funciones que se diseñan para los usuarios de cuentas profesionales de WhatsApp Business. Según afirmó la compañía, “WhatsApp no comparte los datos de sus usuarios en Europa con Facebook con el fin de que Facebook utilice estos datos para mejorar sus productos o anuncios”.