La gran fiesta de la música, que se vivió del 15 al 17 de marzo, demostró que se trata de un evento que cada año se supera a sí mismo. El público disfrutó de un espectáculo único, con una gran variedad de artistas de distintos géneros, y también las marcas hicieron lo suyo con un despliegue de acciones para dar a conocer sus propuestas.
Una vez más el festival de música más importante del mundo emocionó a los fanáticos de Argentina, que asistieron este fin de semana al evento atraídos por la variedad de bandas y artistas presentes.
El Hipódromo de San Isidro reunió shows inolvidables, una puesta en escena impresionante, intervenciones artísticas del más alto nivel, propuestas para chicos que disfrutaron familias enteras, patios gastronómicos de primera y mucho más.
La novena edición de Lollapalooza Argentina no pudo haber tenido un mejor comienzo. La primera jornada contó con la participación de Blink-182, que hizo su debut en el país para presentar One More Time, el disco que corona su reunión; Arcade Fire volvió a ser parte de la edición local del festival diez años después con la vigencia y conexión con el público intactas; YSY-A dio un show histórico poniendo el rap argentino en lo más alto; The Offspring tuvo al público saltando de principio a fin, y Diplo le puso el broche de oro a la noche con una pista encendida y colmada de energía para lo que quedaba por delante.
Por supuesto hubo un espacio importante dedicado al rock nacional. Así fue el turno de una de las bandas nacionales del momento: Winona Riders, mientras que los fans de la música urbana corrieron al show del rapero peruano Jaze o a disfrutar de toda la potencia del hip hop de Oney1. La jornada se completó con las más variadas propuestas y géneros musicales: Paula Prieto y Juana Rozas, Mujer Cebra, Daniela Milagros y Pacífica, El Culto Casero, Fiah Miau, Jere Klein, NSQK, FLETCHER y Juliana Gattas del grupo argentino Miranda!, entre otros.
Los asistentes disfrutaron de un primer día colmado de talento internacional y local y de todos los géneros imaginables. Como cada año, el público iba llegando con esos looks festivaleros que son parte fundamental de Lollapalooza: conjuntos originales, desfachatados, peinados y maquillaje, remeras y merch de los artistas…y sobre todo, ¡la mejor de las ondas para vivir una jornada inolvidable!
Fiel a su espíritu diverso, el segundo día contó con artistas de los más variados géneros musicales, que incluyeron el debut en Argentina del cantante británico Sam Smith, la norteamericana SZA, y la mexicana Kenia Os, así como las potentes presentaciones de los argentinos Miranda!, Robleis, Koino Yokan, Blair y Lucca Bocci, en una jornada en la que el pop brilló en todas sus formas, como en los cruces que propone el inclasificable artista Omar Apollo.
Este segundo día también tuvo DJs de primer nivel, con Above & Beyond cerrando la jornada en una pista de altísima energía que retomó donde habían dejado los sets de Loud Luxury, Timmy Trumpet, y la argentina Franzizca, por nombrar algunos, así como shows de bandas que despliegan las infinitas posibilidades del la electrónica, como los ultra hiteros Jungle.
Otros dos géneros no podían faltar: el rock y la música urbana, parte del ADN del festival. Para el público rockero hubo shows memorables como los franceses que son realeza en el indie, Phoenix, el boom del rock alternativo actual The Driver Era y el del fenómeno indie Nothing But Thieves; mientras que en el panorama urbano brillaron BM, el dueño del viral “Te estás portando mal”, el español Chico Blanco y muchos más.
El tercer y último día de #LollaAR brilló como nunca con los artistas internacionales Feid quien hizo su debut en el país, Limp Bizkit, Hozier, Thirty Seconds to Mars y Meduza a la cabeza, así como con talento argentino de la mano de los geniales Bandalos Chinos, El Zar, Alejo Isaak y Anita B Queen, y más de 30 artistas de diferentes partes del mundo, generaciones y géneros musicales.
Ecléctico, diverso, multigeneracional, con bandas que son clásicos y artistas emergentes, una organización sin contratiempos, una experiencia gastronómica imperdible y un ambiente de primera, Lollapalooza escribió otro capítulo en su historia de amor con Argentina, con producción de DF Entertainment, Live Nation y Perry Farrell, y con el respaldo de Flow que se aseguró de que el festival llegara a cientos de miles de personas más.
Fue un final de fiesta a la altura de lo que fue una novena edición épica. Miles de fans pasaron por el evento más impresionante del calendario, que continúa superándose así en su misión de reunir a la mayor cantidad de amantes de la música con cientos de artistas para cumplir sueños así como también fomentar nuevos descubrimientos.