El CEO de MullenLowe Latam, Francisco Samper, fue galardonado con el prestigioso “Premio Leyenda” en la reciente edición del Festival El Dorado, la cita más importante de la creatividad colombiana.
Visionaria, trascendental e inspiradora. Así ha sido la trayectoria de Francisco Samper en la industria publicitaria y por ese motivo el jueves 2 de octubre fue reconocido con el Premio Leyenda El Dorado, en la edición del festival más importante de la creatividad colombiana.
El galardón, que se ha consolidado como el más prestigioso de la industria publicitaria del país, rinde homenaje a personalidades que han generado un gran impacto en la cultura gracias a sus logros.
“El día que me llamaron para decirme que me iban a dar este premio me dio mucha emoción, fue una reacción espontánea y genuina, es algo bastante satisfactorio y lo recibo con toda humildad”, dijo destacando que pensaba que el premio iba a ser entregado a creativos como José Miguel Sokoloff y Juan Carlos Ortiz, quienes lo recibieron en las dos ediciones anteriores. “Yo me imaginaba que El Dorado iba a premiar nuevamente a directores creativos, por eso la alegría fue mayor, me tomó totalmente por sorpresa”, exclamó.
McCann y Coca-Cola: un sueño hecho realidad
Los inicios de Samper se remontan a 1979, cuando con 18 años empezó en el área creativa de una destacada agencia local. Al repasar su amplio recorrido, recuerda varios logros importantes en su carrera. Uno de ellos fue cuando ingresó a McCann Erickson Cali, un hecho que recuerda como si hubiera sido ayer. “En enero del 86, que era el año en que yo me había propuesto como meta estar trabajando en McCann eso se cumplió”, expresó haciendo referencia al sueño que tenía de joven no sólo de trabajar para McCann, sino también de manejar la cuenta de Coca-Cola.
“Yo recuerdo que me decía, ‘yo tengo que estar trabajando en publicidad, en McCan y manejando Coca-Cola’, esa era mi meta, porque todo lo que hacía Coca-Cola era un referente mundial en publicidad, era la época de las canciones lindísimas, esa publicidad tan bonita de los años 80”.
En McCann, Samper pasó de ejecutivo de cuentas a gerente de la oficina de Cali y luego a director general de servicios al cliente en Bogotá. Bajo su liderazgo, McCann Colombia ganó una gran reputación y se posicionó como la agencia más grande y la más creativa del país.
Al hablar de esa época, recuerda cómo logró completar ese sueño que tenía de joven: “Habíamos crecido mucho, habíamos conseguido clientes muy buenos y un día me llaman y me dicen, ‘te vas a venir a Bogotá como director general y vas a tener como responsabilidad la cuenta de Coca-Cola’… se me demoró un poquito, pero en el año 90 empecé a trabajar con Coca-Cola, fue una escuela lindísima, hicimos cosas espectaculares. nos fue increíblemente bien”, rememoró con satisfacción.
De SSPM a MullenLowe SSP3: referente internacional de creatividad
Sin duda, este hito marcó la consolidación profesional de Samper y su ascenso a posiciones de liderazgo clave en la publicidad colombiana. Sin embargo, no fue el único. En los años 90 fundó junto a José Miguel Sokoloff y Humberto Polar, dos de los creativos más destacados del país, la agencia SSPM. Luego se asoció con Lowe, transformándose en Lowe SSP3 y más tarde en MullenLowe SSP3.
Su proyecto propio se convirtió en un referente internacional de creatividad, responsable de campañas multipremiadas y de formar a generaciones de talentos que hoy lideran agencias en todo el mundo. Sin duda, Samper es el artífice de un gran legado: crear desde cero una agencia emblemática para Colombia y Latinoamérica, que se consolidó globalmente por su creatividad y efectividad.
Con 47 años de carrera, es considerado uno de los publicistas más influyentes de la región, convirtiéndose en un embajador de la publicidad colombiana a nivel global, liderando campañas que trascendieron en el tiempo y llevando a que su agencia se convirtiera en un emblema de excelencia creativa.
Colombia: una potencia creativa
A propósito del homenaje que recibió en el Festival El Dorado y de su vasta experiencia, Samper reflexionó sobre el pasado, el presente y sobre todo el futuro de la publicidad, y especialmente sobre lo que considera le hace falta a la industria colombiana para brillar aún más. Cuando comenzó su carrera, expresa, la publicidad colombiana “no era referente de nada” e incluso “si los directores creativos no tenían un acento chileno, argentino, español, brasilero, entonces las agencias no los miraban”. Sin embargo, ahora el panorama es completamente distinto.
Aseguró que en la actualidad Colombia ocupa un tercer lugar en Latinoamérica en materia de creatividad, sólo detrás de Brasil y Argentina, aunque con un talento que muchas veces supera el reconocimiento que recibe.
Está convencido de que hoy la publicidad colombiana tiene conciencia de su propio valor y es una industria sólida con talento, autenticidad y una visión cada vez más estratégica, pero también cree que hay que cambiar el foco. “Si me preguntas que tendríamos que hacer para destacarnos más, creo que tenemos que pensar menos en los premios y más en los clientes”, concluyó reiterando que el camino recorrido demuestra que, sin duda alguna, Colombia es una potencia creativa en la región.