Raymundo Guerrero, Country Manager de Pomelo en México, explicó cómo el desarrollo de una sólida infraestructura tecnológica, basada en su procesador de pagos interno y su enfoque en la nube, les ha permitido consolidar efectivas soluciones financieras para los negocios.
Raymundo Guerrero describe el entorno en el que Pomelo opera como “un sector muy especializado en medios de pago”, subrayando que van más allá de las tradicionales tarjetas de la banca tradicional y los servicios financieros que han existido a lo largo del tiempo.
“La tecnología se ha convertido en un factor determinante para permitir que los servicios financieros escalen y lleguen a más personas no solo en México sino en toda la región latinoamericana. La respuesta de Pomelo a esta dinámica es construir infraestructuras tecnológicas que permitan a las empresas ofrecer servicios financieros de manera más rápida, escalable y ágil en toda América Latina”, afirmó.
En este contexto, Guerrero señala que en Pomelo abarcan no sólo los pagos con tarjetas, sino también pagos interbancarios, transferencias bancarias, pagos sin contacto, entre otras verticales, con una estrategia que ofrece a las empresas la capacidad de proporcionar a los usuarios soluciones para realizar sus transacciones diarias.
El diferenciador clave de Pomelo, según explica Guerrero, radica en la construcción interna de su procesador de pagos, que elimina la dependencia de terceros y conecta directamente con grandes empresas del sector como Visa y Mastercard, así como con las cámaras de compensación en los países en los que operan.
La decisión estratégica de no contar con servidores físicos es otro de los diferenciadores de Pomelo, en comparación con los procesadores tradicionales. Al ser el primero que opera de manera nativa en la nube, específicamente en un esquema activo-multirregional, cuenta con una capacidad de procesamiento de hasta 55 millones de de transacciones por día. Además de la velocidad en respuesta y seguridad, este enfoque garantiza una alta disponibilidad y flexibilidad.
El enfoque centrado en el cliente es un área esencial de la estrategia de Pomelo. Guerrero asegura que proporcionan toda la infraestructura necesaria para que las fintech desarrollen aplicaciones que permitan a los usuarios realizar una variedad de operaciones; incluyendo la gestión de tarjetas, la solicitud de tarjetas virtuales y físicas, aunado a la administración de movimientos y saldos.
Además de procesar pagos, Pomelo tiene la capacidad de ofrecer servicios adicionales como la fabricación y personalización de las tarjetas, proporcionar APIs para facilitar el desarrollo de otras fintech, entre otros.
Operando en seis países de América Latina; incluyendo México, Brasil, Argentina, Colombia, Perú y Chile, Pomelo ha logrado establecerse como una empresa relevante en la región. Guerrero destaca la diversidad de clientes con los que trabajan, desde bancos hasta empresas fintech emergentes y diversas entidades reguladas en México.
Propuesta de valor
Cuando se trata de dar a conocer el trabajo de Pomelo, el Country manager de Pomelo la importancia de comunicar la propuesta de valor de sus clientes: “No se trata solo del lanzamiento de una nueva tarjeta, sino de explorar la propuesta de valor específica que ofrece ésta”, comentó.
La reciente inversión de 40 millones de dólares, liderada por Kaszek, el fondo de inversión de Venture Capital más grande de América Latina, representó un hito para la empresa, respaldando la visión y propuesta de valor de Pomelo en la industria fintech.
Mirando hacia el futuro y con grandes expectativas tras levantar este capital, Guerrero está convencido de que esta inversión ayudará al crecimiento de las transacciones y al negocio en general: “Estimamos un aumento significativo en nuestro volumen de ingresos y una expansión del 75% en nuestra base de clientes en general, esto nos permitirá acceder a nuevos y mejores clientes y seguir construyendo nuestra propuesta de valor”, concluyó.
Por: Berenice Ibarra