El informe de Endeavor México y Glisco Partners muestra una recuperación en las startups de Latinoamérica, con un aumento del 30% en la recaudación de capital impulsado por áreas estratégicas como la Inteligencia Artificial.
Pese a los grandes desafíos de la economía a nivel global, las startups de Latinoamérica muestran una recuperación en la primera mitad del año. Así lo revela el reciente informe de Endeavor México y Glisco Partners sobre Venture Capital y Growth Equity en Latinoamérica.
Según el informe, hasta el momento el capital recaudado es de US$1.1 billones, lo que representa un aumento del 30% respecto al mismo período en 2023.
Durante los primeros seis meses del año, se realizaron 162 inversiones, una caída significativa del 63% en comparación con la primera mitad de 2023. Aunque 76 empresas lograron recaudar capital, esto supone una disminución del 11% con respecto al año anterior.
Sin embargo, a pesar de la caída en el número de inversiones, el capital levantado aumentó un 30% con respecto al mismo período del año pasado, lo que sugiere una mayor concentración de las inversiones en etapas más avanzadas y en sectores estratégicos.
El avance de la inteligencia artificial
Además, el informe revela varias tendencias que están reconfigurando el panorama del emprendimiento en Latinoamérica. Una de ellas es la Inteligencia Artificial (IA), considerada un área clave dentro del ecosistema.
Según el informe, por primera vez, el sector de IA superó a las fintech en términos de capital recaudado. Un 34% de las rondas de inversión se destinaron a IA, lo que indica un cambio en las preferencias de los inversores hacia soluciones tecnológicas que abarcan diversas industrias. Este crecimiento está impulsado por la demanda de automatización y la adopción de nuevas tecnologías en sectores clave como fintech, comercio electrónico y servicios financieros.
Aunque las fintech siguen siendo un sector importante, representaron sólo el 17% del total de las rondas de inversión, a pesar de captar el 37% del capital total. Esto resalta que, aunque continúan siendo esenciales para el desarrollo financiero en la región, los inversores están ampliando su atención hacia otras áreas tecnológicas.