Conversamos con el reconocido publicista argentino sobre la startup que creó junto a Gerry Graf en plena pandemia y cuyos trabajos para Ballantine’s y Doritos rompen estereotipos y son destacados en las selecciones creativas internacionales de AdForum.
Las dificultades que la industria atravesó en 2020 a consecuencia de la pandemia del COVID-19 no fueron un freno a la hora de emprender nuevos desafíos para el destacado publicista argentino Maxi Itzkoff, quien durante el complicado año que vivimos dio vida, junto a Gerry Graf, a Slap, su nuevo proyecto que llega para darle una cachetada a la publicidad.
Slap no cuenta con el simple apelativo de agencia creativa, sino que se autodefine como una aceleradora de negocios. Este modelo busca entonces propinar un “bofetón” al sentido tradicional del manejo de la publicidad, afirmando: “así es como se hace”. Y así lo demuestra en su manifiesto, que rompe los esquemas del tradicional formato de proclamas y presenta a Slap a los cachetazos en un divertido y fresco musical.
Maxi Itzkoff es el director de Slap Global. El visionario argentino cuenta con una gran trayectoria que incluye su destacado desempeño en Del Campo Saatchi & Saatchi. En este nuevo proyecto, Itzkoff suma fuerzas con el reconocido publicista estadounidense Gerry Graf, el mismo de Barton F. Graf.
Ambos arman un equipo junto con personal que viene de consultoras, medios, estrategia digital, y de comunicación. “Nosotros lo definimos como un ‘wake up call’, ‘Despertate que el mundo cambió y lo que funcionaba ya no funciona’”. En Slap no hacemos nada por default. Hoy hace falta tener un equipo multidisciplinario de verdad, que pueda aportar en el negocio, y no en el copy de un anuncio o un PR stunt”, afirma.
También resalta que la gran diferencia es la integración cosmopolita de un equipo compuesto por gente de siete nacionalidades diferentes y con experiencia en distintos mercados. Itzkoff describe que “en Slap no se trabaja en silos y nadie es jefe de nadie. Otra de las ventajas es que trabajamos integrados con las diferentes oficinas, por lo cual tenemos una visión global de cada negocio, para después poder aplicar ese conocimiento a cada cliente local”.
Actualmente Slap se encuentra trabajando para distintas marcas en distintos países: Estados Unidos, México, Colombia, España e Italia; y trabajan globalmente con anunciantes de la talla de Tigo, Fox Sports, Uber, Bud Light y Oxygen.
Bofetón creativo: Reconocimiento internacional inmediato
Los primeros trabajos de Slap no pasaron desapercibidos para el ojo de AdForum, que seleccionó dos campañas en sus rankings creativos mensuales.
Slap Global abrió un espectro inusual para el universo publicitario con la campaña que hizo para Ballantine’s en donde se pone frente a frente a un persona con su propio “yo digital”, una interpretación virtual de la intimidad del consumidor basada en datos concretos de sus deseos y preferencias. AdForum posicionó a este experimento social como la mejor creatividad del mundo en su ranking Top 5 mensual de Innovación Digital.
“Ballantine’s quería generar preferencia de marca y para ello necesitaba crear una conexión emocional con los consumidores”, apunta Itzkoff. “El gran desafío siempre fue interpretar correctamente esos datos de los consumidores”.
La segunda campaña de Slap Global en ser destacada en los listados de AdForum, esta vez en el Top 5 Latam, fue la propuesta que crearon para Doritos, que le da visibilidad al movimiento LGBT+ y genera una reflexión sobre la diversidad y la inclusión.
El spot, que cuenta con más de 19 millones de views, es más cercano a un cortometraje que a un comercial tradicional y está basado en hechos reales. Cuenta Itzkoff: “se trata de una historia real que encontramos en Reddit, en la cual un padre pide ayuda para poder encarar la charla con su hijo y su apertura sexodiversa. Y como resultado de esto, más de 50 mil personas le dan consejos”.
La pieza cuenta con actores de teatro y no de publicidad, un ingrediente que ayudo a darle a la pieza el realismo necesario. “Logramos que la pareja de chicos se conociera antes de la filmación. Y que absolutamente todo el casting se viera como gente real, como si estuviéramos entrando a un momento íntimo de su vida”, relata Itzkoff.
Al preguntarle sobre la razón por la que cree que los dos primeros trabajos de Slap Global tuvieron tan buena recepción, Itzkoff no tiene dudas, y lanza su golpe de gracia final: “Todo lo que hacemos tiene que tener relevancia cultural, y por supuesto, resultados de negocio”.