En el marco de la publicación del ranking “Best Countries 2024”, que posiciona a México como el país hispanohablante mejor evaluado a nivel global, Carolina Rubiano-Groot Gómez, Chief Strategy Officer en VML México, compartió su perspectiva sobre el papel del país como un epicentro de creatividad y negocios, así como los retos y oportunidades para las marcas mexicanas en un mundo cada vez más conectado.
El estudio evalúa la percepción global de las naciones y resalta atributos como calidad de vida, apertura a los negocios, herencia cultural e innovación y reconocimiento internacional que no solo reafirma a México como un referente en América Latina, sino que también proyecta una imagen de fortaleza y dinamismo en el escenario global.
“En un momento en donde hay tanto ruido alrededor de la situación del país, con los cambios políticos y económicos, vale la pena recordarnos a los mexicanos y al mundo, lo que representa México: una tierra de creatividad, ancestralidad y futuro”, comentó Rubiano-Groot.
El informe, desarrollado en colaboración con BAV Group, analizó las respuestas de más de 16.000 personas en 89 mercados, destacando que el 77% de los consumidores globales considera el país de origen como un factor diferencial al elegir productos. En este contexto, México no solo se posiciona como una potencia manufacturera, sino como un epicentro de creatividad y cultura que inspira confianza en los mercados globales.
Marcas mexicanas: el reto de resignificar su narrativa
El reconocimiento de México en este ranking representa una oportunidad invaluable para las marcas locales. Según Rubiano-Groot, el desafío para estas empresas radica en “reinventar su narrativa”. “Lo que nos trajo hasta aquí no será necesariamente lo que nos lleve hacia los próximos 100 años. Estudios como este nos ayudan a identificar atributos que resignifiquen lo mexicano y potencien el valor de nuestras marcas”.
La riqueza cultural y el legado histórico de México se han convertido en elementos clave para las estrategias de las marcas: “Estamos viendo cómo la ancestralidad y los nuevos valores atribuidos a México lo están posicionando como el país más relevante para pensar en creatividad y negocios. El mundo desea volver al origen, y México es el mejor referente de ese origen, combinando tradición con innovación tecnológica”, destacó Rubiano-Groot.
Además, enfatizó que industrias como la farmacéutica y la cosmética ya están capitalizando sobre este legado, utilizando herbolaria y técnicas tradicionales como soluciones innovadoras: “Hoy se está creando el futuro desde cimientos muy sólidos, y eso es algo que debemos aprovechar como marcas para reconectar con nuestros consumidores”, añadió.
La valentía como motor de transformación
La directiva subrayó que las marcas tienen una responsabilidad en la construcción de cultura y en la reinterpretación de lo tradicional; sin embargo, esta transformación exige coraje, pues “el reto está en la valentía de evolucionar narrativas”. “A veces nos aferramos a lo tradicional por temor a romper esquemas. Pero hoy más que nunca necesitamos atrevernos a crear nuevos mundos desde lo mexicano, mostrando que somos capaces de transformar la cultura y de llevarla más allá de sus límites actuales”, afirmó.
Asimismo, destacó la importancia de comunicar los logros de las marcas mexicanas, especialmente en temas de sostenibilidad: “Hay veces que el miedo al ‘greenwashing’ impide que las empresas hablen de lo bueno que están haciendo; sin embargo, es fundamental que las marcas se atrevan a compartir sus avances y comprometerse con nuevos discursos que reflejen su impacto positivo en la sociedad”, dijo.
Un futuro construido desde México para el mundo
La posición de México como referente global también representa un compromiso para las agencias creativas, ya que “como la agencia número uno en México, en VML creemos que la creatividad es un motor económico que nos permite construir nuevos referentes para Latinoamérica desde México para el mundo. Es nuestra responsabilidad aprovechar esta oportunidad para transformar la cultura y cerrar brechas entre consumidores y marcas”, concluyó.