Carlos Guardado, director general de Bacardí México, comparte con INSIDER LATAM los detalles de la renovación de la alianza entre Tequila Patrón y el piloto mexicano Sergio “Checo” Pérez, destacando que ambos comparten valores como la excelencia, la perseverancia y el orgullo mexicano.
En el mundo de las marcas premium, no todas las colaboraciones trascienden la simple visibilidad para convertirse en verdaderas alianzas estratégicas. Pero cuando esto se logra, los resultados son tan positivos que incluso van más allá de las ventas. Este es el caso del acuerdo que mantienen la emblemática marca Tequila Patrón y el piloto mexicano Sergio “Checo” Pérez.
Carlos Guardado, director general de Bacardí México, explica que este vínculo se fundamenta en valores compartidos: la búsqueda de la excelencia, la persistencia y una calidad inquebrantable: “Tenemos una admiración y respeto mutuo con Checo. Él ha puesto en alto el nombre de México en las mejores pistas, al igual que Patrón ha llevado el tequila premium a los mejores restaurantes y bares del mundo”, afirma.
La relación entre el piloto mexicano y la marca no es nueva, pero su renovación llega en un momento especial. Aun cuando Checo no está actualmente en competencia, la marca reafirma su compromiso con acompañar su trayectoria y proyectar juntos los valores de la marca. “Se nos asociaba con la Fórmula 1, pero nuestra alianza siempre fue con Checo. Aunque él no esté corriendo por ahora, seguimos fieles a esa relación”, enfatiza Guardado.
Para Tequila Patrón, Checo Pérez es mucho más que un embajador, es la personificación de sus valores. “La idea es que los consumidores vivan la marca más allá de una valla o un anuncio digital. Queremos estar en el momento y lugar donde celebran: bares, restaurantes y reuniones entre amigos. El mexicano vive de celebración en celebración y Patrón quiere ser parte de eso”, asegura.
Este enfoque busca transformar el concepto de “orgullo mexicano” en experiencias tangibles que conecten con el consumidor en todos los puntos de contacto, desde los medios masivos hasta el punto de venta.
Para Bacardí México, la relación con Checo Pérez es una oportunidad de proyectar la cultura y el talento mexicano a mercados clave: “Esa autenticidad y calidad de ambas marcas permite sentarse en la misma mesa y hablar del orgullo de México”, señala Guardado, al destacar que Tequila Patrón es un producto artesanal hecho 100% de agave weber, lo que refuerza sus credenciales como líder global del segmento super premium.
Midiendo el éxito más allá de las ventas
Aunque las ventas son un indicador final, para Bacardí México el éxito se mide en atributos de marca: “Nos interesa más el orgullo mexicano y la percepción de calidad. Eso se traduce en salud de marca, y después, naturalmente, en participación de mercado”, explica.
Estos atributos no solo se construyen a través de Checo Pérez, sino mediante un ecosistema de plataformas que la marca ha desarrollado a lo largo de los años.
El trabajo con Checo Pérez forma parte de una visión más amplia de Bacardí México: fortalecer su plataforma de alianzas con talento nacional. “Hemos trabajado con arquitectos, artistas y celebridades que representan los valores de Patrón. Continuaremos invirtiendo en México y en este tipo de colaboraciones”, confirma Guardado.
La clave, según el directivo, está en adaptarse a los cambios constantes del mercado y del consumidor: “Siempre estamos atentos a tendencias y practicamos social listening para entender qué mueve a los mexicanos en torno a su cultura, su gastronomía y sus celebraciones. Ese es el insumo para elegir con quién nos asociamos”, comenta.
Más allá de la temporalidad de una campaña, Guardado visualiza un impacto duradero: “Lo que me gustaría es que, al mirar hacia atrás, los consumidores recuerden el valor, el orgullo y la calidad que Patrón le ha dado a México, y que esa percepción se consolide tanto como la calidad de Checo”.