La destacada productora colombiana asumió recientemente su nuevo rol como directora en Casta Diva, un reto que enfrenta con mucho entusiasmo en medio de los retos y tendencias actuales del mercado latinoamericano.
Con una nutrida trayectoria en el mundo de la producción, especialmente en Canadá y México, Pilar Zapata se unió recientemente al equipo de Casta Diva para aportar con su particular visión los trabajos que se tienen previstos para este año.
Su llegada a esta importante productora, asegura, significa cumplir una de las metas más importantes para su carrera, debido a que cuenta “con un alto nivel de producción, un excelente nivel de talentos, pero sobre todo tiene una diversidad de estilos que incluye directoras y directores de diferentes orígenes”.
Para “Pili”, como es conocida en la industria, este aspecto es uno de los más importantes, no sólo porque “enriquece el producto final sino también porque amplía la mirada de quienes trabajamos en cada producción”.
Según explica, esta cualidad es una de las que más valora, porque “es ser consecuente con el momento histórico que vivimos, en el que la diversidad y la inclusión deben ocupar los espacios y los discursos de comunicación en nuestro trabajo”.
La contemplación como clave
Además de una notable participación en la dirección de cine publicitario, Pilar también se ha dedicado al estudio de diversas técnicas de dirección de actores, guión y dirección cinematográfica en Nueva York.
En este sentido, y sobre su estilo de realización de contenidos, dice que es “difícil definir tu propio estilo”. “Creo que el estilo es una construcción que se va concretando al pasar de los años. Aún no veo que mi estilo esté definido por algo en especial, pero sí podría decir que la contemplación es algo que me define, bien sea sobre una idea, una emoción, una situación o un detalle, haciendo que estos últimos hagan parte de la narrativa o del punto de vista de la historia, con los que siento que puedo evocar emociones sutiles, cargadas de síntesis y significado”.
Quizás por esta razón, es que las influencias en el trabajo de Pilar son tan diversas como su forma de encontrar inspiración; incluso, manifiesta que es una lista que podría ser interminable: “Mi influencia más grande ha sido el cine de Terence Malick, el de Paul Thomas Anderson, Martín Scorsese, Godard y Alfonso Cuarón. Paso horas viendo entrevistas de ellos o comentarios sobre sus películas, y entrevistas de directores de fotografía como Dickens, Wally Pfister, Prieto, el Chivo, Richardson, Almendros, Elswit y Doyle.
Además de estas figuras también destaca la influencia de personajes de su país, Colombia, tales como Gabo y Débora Arango, “por la manera como han retratado nuestros conflictos e idiosincrasia”, acota.
A nivel musical la ópera de Mozart, la carrera de David Bowie o el teatro minimalista de Julia Cameron y Judith Weston son otras de sus influencias. Pero en particular, considera que su influencia más directa ha sido vivir en distintas sociedades…“porque me ha dado la posibilidad de llenarme de imágenes y sensaciones al observar las diferentes culturas y cotidianidades”.
Mercado argentino de alto nivel
Con respecto al mercado argentino, asegura que siempre se ha caracterizado por generar producciones del más alto nivel, al punto de ser uno de los mejores de Latinoamérica y hacer parte de una ¨premier ligue mundial¨.
Sin embargo, al igual que otros países de la región, atraviesa por una crisis que se refleja en importantes cambios en la inversión publicitaria. “Hay una inmensa necesidad de crecimiento de contenido en medios digitales para pequeños players y es ahí donde está el desafío para reinventarse e invertir en capital creativo y ser recursivos a la hora de producir. Creo que eso es lo valioso del momento post-pandémico que vivimos, viene un crecimiento en el que las producciones y la publicidad tienen la necesidad de reactivarse, crear nuevas ideas y nuevas formas de producir para conectar de manera más directa con los consumidores”.
Esto confirma su visión sobre la producción latinoamericana que, a su modo de ver, es de primera calidad, especialmente en países con una historia y una trayectoria importante en realización de cine como México y Argentina.
“También creo que el bagaje intelectual, técnico y cultural que tenemos en nuestros países es muy vasto y completo a diferencia de lo que creemos cuando nos comparamos con países del primer mundo. La preparación intelectual y técnica que tenemos es muy amplia, hemos tenido que retarnos, ser más recursivos, crear alternativas para producir y contar historias de otras maneras, lo que nos hace excelentes y muy competitivos.
Conectar marcas y consumidor
Más allá del tipo de contenido que tiene mayor relevancia hoy en el mercado, Pilar destaca que la tendencia que predomina es la necesidad de conexión y creación de una relación fuerte y emocional entre las marcas y el consumidor.
“Por eso, cada vez las narrativas y los discursos se parecen más entre sí, porque parten de un lugar tan cotidiano y auténtico como la conexión con el corazón, la nostalgia y las emociones. Dependiendo de la estrategia de comunicación que necesita una marca para alcanzar las ventas y al target al que quiere llegar, sobre todo en lo digital, es muy interesante ver cómo hoy en día, no hay una fórmula establecida como existía hace 20 años…hoy en día, lo importante es la historia que quieres contar y cómo la vas contar, lo cual para nosotros los directores es muy valioso porque la historia y el storytelling son ahora los protagonistas.