La nueva película del Universo Marvel, Eternals, invita a reflexionar acerca de la necesidad de que la industria del entretenimiento comience a contar historias donde la inclusión y la diversidad ocupen un lugar central.
En este mes se conmemoran dos fechas importantes en materia de derechos: el 3 con el Día Internacional de las Personas con Discapacidad y el 10 con el Día Internacional de Derechos Humanos. Las personas con discapacidad, según datos de la ONU, son la “minoría más amplia del mundo”, de hecho en Argentina es cercana a un 13%, es decir que alrededor de 5 millones de personas en el país tienen alguna discapacidad.
Dentro de cientos de batallas por el respeto, la inclusión y la diversidad que como sociedad debemos dar para que estas enormes minorías gocen en plenitud de sus derechos, sin duda, la presencia y la representación de ellas en ámbitos tan cotidianos como el entretenimiento es fundamental. Pareciera ser que lo que no se visibiliza o se visibiliza de una forma estereotipada, se estigmatiza. Y más en la niñez.
“Lo que imaginamos y transmitimos a través de las historias, impacta en la vida de las personas. Cuando esta imaginación se pone al servicio de contar historias que desafían conceptos arraigados y estereotipos, se abren oportunidades de cambio social”, explicó Belén Urbaneja, Directora de Responsabilidad Social Corporativa, Gestión de Marca y Diversidad e Inclusión de Disney, quien agregó que cuando los desarrolladores piensan contenidos de y para todas las personas, se genera la construcción de realidades posibles.
Hasta hace poco tiempo los súper héroes tenían un estereotipo definido: principalmente masculino, fuerte, ágil, capaz y bondadoso. Muchas generaciones crecieron con figuras de esta naturaleza como referentes. Desde hace años y cada vez con más fuerza el entretenimiento está abriendo el espectro de esa representación y mega lanzamientos como Eternals lo confirman. La película número 25 del Universo Cinematográfico de Marvel (MCU, por sus siglas en inglés) presentó hace unos días diez superhéroes y superheroínas diversos. Y si bien el cine nunca se privó de contar historias sobre protagonistas con todo tipo de poderes, lo que distingue al filme es que aparece como valor la diversidad.
Pueblos originarios, culturas pasadas y paisajes de América Latina como escenario; diferentes culturas y orígenes interactuando; la diversidad sexual y el género representado en un universo de superhéroes que estaba históricamente representado por lo masculino; diferentes formas de comunicarse: en inglés, español, babilonio y lengua de señas inglesa; sumado a la inclusión de las personas con discapacidad con roles protagónicos, son anclajes que ayudan a construir una trama que, antes que distraer, normaliza la diversidad, hasta el punto de hacer pensar que un mundo con igualdad es posible.
Lauren Ridloff nació sorda de padres oyentes y su papel más popular hasta ahora fue el Connie en la serie de televisión The Walking Dead. La actriz interpreta en Eternals a Makkari, una luchadora cuya energía cósmica la convierte en la mujer más veloz del universo. Makkari no solo es el primer personaje sordo de Marvel, es un paso enorme de un gigante del entretenimiento por representar a esas enormes minorías.
“Creo que lo más importante de tener un superhéroe sordo en una película como esta es que transmite el mensaje de que un individuo puede ofrecer mucho más, independientemente de su capacidad, sus fortalezas o sus debilidades. Estoy feliz”, expresó Ridloff.
El debate que genera Eternals es parte del conflicto histórico necesario para que ocurran cambios. Hoy atravesamos cambios y conflictos de cara a la conquista de la igualdad e inclusión de todas las personas en la sociedad. Por eso, entregas como estas se convierten en la metáfora de la metáfora. En algo capaz de mantener la atención en una trama con conflictos y personajes complejos mientras se cumple con el objetivo no solo de salvar el planeta Tierra sino, a la vez, representar la diversidad, un gran paso hacia la igualdad.