La compañía busca acercarse a la Generación Z y ser su aliada en el cuidado de su piel. Para ello, contó con el apoyo de la agencia I-Beauty y de dos de los streamers más famosos de México.
L’oréal y I-Beauty, la agencia creada por el Grupo Publicis para L’oréal, lanzaron “Acne Fighters”, convirtiéndose en los primeros en lanzar una campaña para ampliar la comunicación sobre el cuidado de la piel acercándose a la comunidad gamer a través de la plataforma Twitch, con el objetivo de crear una actitud positiva de la Generación Z hacia la marca.
L’oréal identificó a través de diversos estudios desarrollados por la marca que, durante la pandemia, el acné se había incrementado entre los jóvenes y que ellos carecían de información al respecto. Además, gracias a la data de la que disponen, identificaron que dentro de esa población joven de entre 16 y 25 años, un 51% correspondía a la comunidad de gamers. Para conectar con ellos, desarrollaron una campaña bajo un concepto Full Funnel, donde se combinó la segmentación táctica y formatos de anuncios de Twitch y DSP de Amazon, para promocionar principalmente el “discovery” de la marca.
La estrategia que utilizó I-Beauty junto con L’oréal fue la de acercarse a los gamers a través de dos de los mejores streamers de México, con personalidades completamente opuestas. Durante la “Skin Week” se dirigieron a los miembros de la comunidad, haciendo labor de educación para explicarles la importancia de consultar a un dermatólogo para atacar los problemas de acné, cómo cuidar la piel de su rostro, qué son los productos Vichy y La Roche-Posay y cómo usarlos. Para hacer más efectiva la actividad, se apoyaron del Chatbox para explotar al máximo la interacción con los seguidores de los streamers. El uso de comandos permitió darles a las personas el enlace directo para comprar cuando hablaban de la marca y el enlace del dermatólogo cuando él hablaba.
“Acne Fighters” fue una campaña digital en su totalidad, dentro de las plataformas Twitch y Amazon, y supuso un reto, al no ser un tema común dentro de las conversaciones de la comunidad gamer; por lo que se corrió el riesgo de que los esfuerzos no obtuvieran los resultados deseados.
Para Susana Marquez, directora de la marca La Roche-Posay en L’oréal, “esta campaña fue una apuesta diferente e innovadora para poder acercarnos a los Gen-Z y estamos muy contentos con los resultados y la respuesta que obtuvimos, porque nos ha permitido llevar el mensaje de un dermatólogo experto y así contribuir positivamente en la concientización del cuidado adecuado de la piel”.
La campaña obtuvo muy buenos resultados, logrando impactar a 1.1 millones de usuarios y aumentando el tráfico de búsqueda orgánica de la línea de productos de Vichy y La Roche-Posay en un 35% en comparación con el período anterior a la campaña.
“Me encantó que La Roche-Posay y Vichy se dieran la oportunidad de voltear a ver lo relevante que es informar a esa generación que sufre, ha sufrido problemas de la piel o bien desconoce los hábitos correctos de cuidado, que cuando no son adecuados, les pueden causar efectos emocionales más allá de los físicos. La participación del dermatólogo fue atinada ya que la comunidad se sintió segura y convencida de la información que estaba recibiendo, creando conexión con el valor de la marca”, declaró I-Beauty, agencia de medios de L’oréal.