En el marco de los webinar Fintech llevados a cabo por la Cámara Argentina de Fintech, expertos debatieron acerca de las últimas tendencias en Open Banking.
Open Finance es el término que se refiere al principio de intercambio de información financiera no solo de bancos, sino de cualquier entidad financiera. De esta manera, en un servicio financiero se pueden agregar cuentas de diversas instituciones, consolidando los diferentes formatos que manejan en uno solo. Esta tendencia tiene gran potencial, ya que permite mejorar los servicios financieros, estimulando el desarrollo de nuevos servicios y mejorando la eficiencia de las empresas.
Según los expertos que participaron en el panel sobre esta temática organizado por la Cámara Argentina de Fintech, si bien Argentina todavía no está abierta para hablar de un sistema de Open Banking, en Europa y otros lugares ya está instalado el concepto y fue uno de los acercamientos para compartir datos financieros y la posibilidad de transaccionar en nombre de otro en el sistema bancario. Lo que ofrece a los clientes finales es la posibilidad de que ellos otorguen un permiso a terceros para que accedan a determinada información que es privada, en Argentina y en todo el mundo, para realizar operaciones concretas en su nombre.
“Open Banking a partir de dos modelos, el ejemplo europeo donde fue pusheando por la regulación, donde los bancos se adaptaron a la regulación, y también está el modelo americano donde fue impulsado por el mercado, que empezó a abrir APIs para dar respuesta a una demanda de los usuarios y acá ese fue el reconocimiento, ya que los usuarios en Argentina tienen un récord de cantidad de tarjetas y cuentas bancarias respecto de otros países”, sostiene Rafael Soto, CEO de MODO.
Desde la experiencia de ANK, lo que se vio fue cómo partiendo del estado de infraestructura que hay en el país, se puede recrear esa experiencia, cómo crear una plataforma que incluya todo sin dejar fuera nada, disminuyendo el costo de cambiar, entendiendo que tal vez se necesite tener un banco o un servicio en una Fintech. “Trabajamos en tener todos esos servicios en un solo lugar”, compartió Leonardo Rubinstein, CEO de Ank.
Valeria Rodríguez, Directora de Lyra para Argentina, analizó la experiencia del caso europeo y americano y destacó que la Unión Europea tiene dos ejes rectores para esta tendencia, uno que es garantizar la seguridad jurídica y el segundo, orientado a la neutralidad tecnológica. Hizo énfasis en que sería bueno que se tomaran en cuenta para el desarrollo en el mercado local. “Por un lado está la normativa, todo lo que se quiere hacer, los ejemplos que podemos tomar del mundo y la realidad que vivimos en la práctica como argentinos, proyectando a futuro lo que queremos de Open Finance, así como tenemos el mercado europeo super regulado y que tuvo de alguna forma la necesidad de esa regulación para homogeneizar todo lo que pasaba en Europa, tenemos el mercado asiático en donde no se necesitó de una regulación para armar una estructura de Open Finance”, añadió Rodríguez.
Para la vocera es importante que al pensar en la mejor forma de construir el mercado para el Open Finance en Argentina, se tenga en cuenta qué es lo que quiere la industria fintech en el futuro, tomar lo mejor de cada caso, saber que nunca vamos a replicar un único modelo, pero que sí tenemos buena base para el desarrollo local y todo lo que propicia Latinoamérica.
Open Finance como oportunidad para trabajar en la inclusión financiera y la seguridad
Según los voceros, Open Finance no solo va a permitir desarrollar nuevos productos sino también generar inclusión, hacer participar a gente excluida hoy de ciertos productos, y también va ayudar a fortalecer todos los temas relacionados con seguridad digital, como validación de datos personales y validación a través de distintos estándares. “La participación y la disponibilidad de datos va a favorecernos en un montón de cuestiones y para cada una de esas cuestiones va a haber un producto y probablemente una organización aprovechándolo”, añade Rodríguez.
Existe una política europea de sostenibilidad y digitalización, en cuyo ámbito se ha adoptado la estrategia de Finanzas Digitales de la Unión Europea. Esta estrategia está basada en la búsqueda de la seguridad jurídica, innovación, remoción de obstáculos y la facilitación del acceso a las finanzas digitales preservando la neutralidad tecnológica. Cuando se enfatiza esto último, se remarca la búsqueda de un equilibrio entre las ventajas de las finanzas tecnológicas teniendo en cuenta los riesgos derivados del uso de la tecnología.
Este modelo de colaboración de quienes regulan y equiparan acompañado por un marco de seguridad jurídica favorece el efectivo e igualitario desarrollo de todos los que componen el ecosistema: no solo quienes generan nuevas tecnologías, sino también los usuarios dueños de esos datos por detrás.