Camila Tribin, Global Head of Social Media Excellence en SAMY, comparte su visión sobre el futuro del marketing digital y analiza el concepto de descubrimiento orgánico: una nueva forma de potenciar la presencia de las marcas en los entornos sociales y de inteligencia artificial, basada en autenticidad, datos y estrategia.
Durante años, la ecuación era clara: más inversión en medios equivalía a más visibilidad. Pero hoy, el escenario cambió. La forma en que los usuarios descubren productos y marcas se ha transformado radicalmente.
El proceso de búsqueda ya no comienza en Google, sino en TikTok Search, Instagram Explore, YouTube Shorts o incluso en asistentes de inteligencia artificial como ChatGPT o Gemini, que se han convertido en piezas clave dentro del camino de descubrimiento e investigación de las audiencias.
En este nuevo entorno, no se trata de invertir en pauta para “comprar un lugar”, sino de trabajar estratégicamente para merecerlo. El contenido orgánico, la colaboración con creadores, el community outreach y muchas otras tácticas cobran hoy una relevancia única.
Como revela nuestro más reciente informe, los algoritmos sociales y de IA ya no premian la inversión, sino la relevancia y la confiabilidad. Es aquí donde surge un concepto que está marcando el rumbo del marketing moderno: El Descubrimiento Orgánico.
El Descubrimiento Orgánico se basa en optimizar la presencia de las marcas en los espacios donde las audiencias realmente buscan información, combinando contenido propio, estrategias de influencer marketing y de relaciones públicas para construir autoridad y autenticidad. Se trata de volverse relevante al ser parte activa de las conversaciones y tendencias que los usuarios consumen en tiempo real.
Este cambio exige una transformación profunda en la manera de concebir las estrategias sociales. Si las audiencias descubren productos en entornos sociales y los algoritmos priorizan lo auténtico y lo orgánico, las marcas deben centrarse en generar contenido que encuentre al consumidor en el punto medio del camino, entendiendo su intención en cada interacción, búsqueda o pregunta.
Los canales propios son el activo más sólido de las marcas, ya que son los únicos espacios donde se controla la narrativa, la relación con la comunidad y los datos. Cuanto más valioso y confiable es el contenido orgánico que se produce, mayor visibilidad obtiene en las plataformas sociales y en los propios asistentes de IA.
Los creadores, por su parte, son aliados clave: aportan credibilidad, autenticidad y acercan a las marcas a las comunidades de forma natural. Sin embargo, su rol debe evolucionar: no se trata solo de ser seguidos, sino de ser encontrados.
Las audiencias buscan inspiración y confían en los algoritmos para descubrir cosas nuevas. El desafío para las marcas ya no es únicamente generar awareness, sino convertirse en la mejor respuesta posible dentro de los nuevos canales de descubrimiento. Y eso se logra con consistencia, creatividad y una visión social-first que comprenda que el descubrimiento orgánico es el futuro en el entorno digital.
Nuestro informe sobre Descubrimiento Orgánico es solo el comienzo. Con él, buscamos abrir una conversación necesaria en el mercado: cómo medir, escalar y automatizar el descubrimiento orgánico de las marcas.
En SAMY hemos ido más allá, desarrollando un framework operativo que permite a nuestros equipos hacer realidad el descubrimiento orgánico para nuestros clientes. Trabajamos de la mano con el equipo de Data y otros actores clave para ofrecer una metodología completa de ejecución y medición, que poco a poco empieza a formar parte estructural de las estrategias sociales de las marcas.
Nuestra obsesión es comprender e implementar herramientas y automatizaciones que identifiquen oportunidades clave de captura de datos, como keywords y queries, desarrollar sistemas de medición que evalúen el descubrimiento en tiempo real y diseñar procesos que integren creatividad, datos y tecnología para escalar resultados globales.
La visibilidad ya no se compra: se construye con estrategia, consistencia y contenido que inspire a ser descubierto.
