En esta columna, Natalia Serna, CEO de Goldfish, explora cómo el Social Commerce está democratizando el retail: un modelo en el que los creadores se convierten en nuevos canales de venta, las plataformas sociales en vitrinas y la inspiración en una transacción inmediata.
Durante décadas, el retail estuvo reservado para unos pocos: grandes superficies, cadenas con poder logístico o plataformas de ecommerce con altos presupuestos. Hoy, esa lógica se rompe. Con un celular, una comunidad y una historia bien contada, cualquier creador de contenido puede convertirse en un nuevo canal de ventas para una marca.
Este cambio redefine las reglas del juego. Las marcas ya no dependen únicamente de sus canales de distribución: pueden vender a través de cualquier creador de contenido. La venta ocurre en el mismo lugar donde se inspira. Y la recomendación de un creador puede convertirse en una transacción en segundos.
Bienvenidos al Social Commerce: la verdadera democratización del retail.
Y en Goldfish, no solo lo entendimos: lo estamos liderando en América Latina con clientes como Temu, Aliexpress, Totto, Chevignon, entre otros.
¿Qué es Social Commerce y por qué importa ahora?
Social Commerce es la integración del ecommerce dentro de plataformas sociales como TikTok, Instagram, Facebook o Pinterest. A diferencia del ecommerce tradicional —donde la compra se realiza en una web externa— aquí todo sucede en el mismo lugar donde el usuario se informa, se entretiene y se conecta. Es contenido que convierte.
Según Shopify, en 2025 el 17% de las ventas globales de ecommerce se realizarán a través de redes sociales. En Estados Unidos, se proyectan ingresos cercanos a los US$80 mil millones. Y lo más poderoso es que este fenómeno no es exclusivo de Gen Z: millennials, Gen X e incluso boomers ya están comprando dentro de social media.
¿Por qué Social Commerce es el paso lógico para las marcas?
Porque hoy no se trata solo de generar awareness. Se trata de transformar la influencia de los creadores en ventas reales para las marcas.
Los creadores son los nuevos vendedores. Su contenido, autenticidad y conexión con la audiencia generan tasas de conversión superiores a las de cualquier canal tradicional.
Y además: ¿por qué tener 100 vendedores si puedes tener a más de 1.000 creadores promoviendo tu marca?
Las plataformas están listas. TikTok Shop/Instagram Shopping (México y Brasil), Facebook Marketplace y otras ya ofrecen herramientas robustas para activar tiendas dentro de las redes sociales.
Asimismo, a través de social commerce se pueden diseñar modelos de pago mixtos con creadores —combinando canje, fee y revenue share— pero siempre asegurando que el modelo genere un retorno sobre la inversión positivo para la marca.
La data lo respalda:
- Se estima que el crecimiento del social commerce será exponencial, creciendo a una tasa anual del 36.4% desde 2024 a 2033 (fuente: Grand View Research)
- El 42% de los consumidores ya inicia sus búsquedas de productos en plataformas sociales (fuente: eMarketer).
- Las campañas de Social Commerce generan hasta 24% más adquisición de nuevos clientes (fuente: Shopify).
¿Qué sigue?
Las marcas que integren influencer marketing + social commerce + tecnología + data serán las que ganen. Porque ya no se trata sólo de influir. Se trata de inspirar y convertir en el mismo lugar donde se consume el contenido.
En Goldfish lo tenemos claro: el futuro del comercio es social. Y por eso, a través del Social Commerce, nos convertimos en un nuevo canal de ventas para la marca. Entendemos que las marcas no viven solo de impresiones, likes o shares, sino que necesitan mover su caja registradora.
¿Estás listo para vender donde tus consumidores ya están comprando?